Cuarto rasgo de las personas creativas: Permanecer centrado en medio del caos

Cuarto rasgo de las personas más creativas: Pueden permanecer centrados y funcionando en medio de la confusión y el caos.

A fin de mantenerte centrado y sereno cuando todo a tu alrededor es confusión, necesitas desarrollar la habilidad de hallar tu centro. Para hacerlo, identifica dos momentos de tu jornada laboral en que las cosas sean más frenéticas y estresantes para ti. Ahora planea reservar cinco minutos para centrarte justo antes de esos dos períodos, utilizando la técnica siguiente:

Busca un sitio donde puedas estar solo y en silencio. Siéntate cómodamente y cierra los ojos. Presta atención a tu respiración, concentrándote en el paso del aire por tus fosas nasales. Visualiza el aire como leves volutas que entran por tu nariz y vuelven a salir suavemente. Al cabo de dos minutos, comienza a sentir el cuerpo (es decir, repara en las sensaciones interiores, en la piel, el peso de tus miembros, etc.). Después de un minuto, lleva suavemente la respiración al centro de tu pecho y pósala con levedad allí. Es posible que a los pocos segundos te distraiga un pensamiento o una sensación fugaz. No te resistas, pero cuando notes que ocurre eso, vuelve suavemente la atención a tu pecho. Termina el ejercicio permaneciendo sentado sin hacer nada.

Aunque la técnica es muy simple, con frecuencia produce descargas de energías negativas; quizás sientas que tus hombros se liberan de una carga pesada y que una sensación de liviandad y calma impregna todo tu ser. Lo más importante es que comprenderás, con la experiencia, que permanecer centrado es el modo más natural y cómodo de enfrentar cualquier situación, por caótica que sea. Centrarse es un modo de volver al yo y desligarse de la confusión que te rodea.

Deepak Chopra. Libro: Cuerpos sin edad, mentes sin tiempo.

Foto de Alexandr Podvalny en Pexels

No hay cosa que tengamos más a mano que nuestra respiración. Ahí está siempre, a nuestro lado y, quizás por ello, no le prestamos ni un segundo de nuestro tiempo. Enfocar la atención en nuestra respiración es sencillo y gratis, como decía el otro día una renombrada psicóloga en una maravillosa mesa redonda organizada por MRC Training, y los seres humanos, qué lastima, buscamos siempre lo complicado y lo caro. Sin embargo...

¿Verdad que valoras a las personas serenas, que no saltan a la mínima, que en los momentos de mayor frenesí se mantienen ecuánimes, que son como las aguas tranquilas de un lago? Solo ellas pueden pensar con claridad en esos momentos y poner algo de luz en el remolino que se ha generado. Yo lo reconozco, cuando me encuentro con alguien así, le hago una reverencia interior y le observo y me mantengo cerca a ver si se me pega algo de su armonía. Sin embargo...

No hace falta fijarse en otros pues existe una técnica, sencilla y gratis, que podemos empezar a practicar desde ahora mismo. Esa técnica es: Respira, simplemente respira. Inspira lentamente prestando atención a cómo pasa el aire por tu cuerpo, refrescándolo, llenándolo de amor, luz y energía. Expira lentamente, prestando atención a cómo, mientras sale el aire de tu cuerpo, lo libera de neuras, angustias y alquitrán.

Es lo más fácil y sin embargo lo más complicado pues tu cerebro intentará convencerte de que no hay tiempo, que tienes llamadas que hacer, ropa que tender, papeles que leer. Es tan divertido observar las frases que tu mente te dice para que no cambies... Pero eres mucho más que tu mente. De hecho, eres su jefe, su presidente, su rey. 

Así que el reto de esta semana es: respira, respira atentamente, porque solo así conseguirás volver a casa.

Os dejo aquí una preciosa canción:

Respira-Luis Fonsi